Mi amante piano - Poesía

Mi amante piano



Te encuentro allí, cuando llega tarde la noche, estás esperando silencioso, pausado, mi llegada, nuestro encuentro.

No sabemos cuándo, no sabemos cómo se producirá el momento compartido. Tú simplemente esperas allí, a que decida verte y acercarme a ti.

Me siento frente a ti, con la complicidad de la noche, en medio del silencio oscuro, a veces una tímida lluvia nos acompaña, otras veces la tormenta golpea con fuerza la ventana de la habitación.

Tú, sólo esperas. Sabes hacerlo a la perfección. Conoces bien esa mezcla perfecta entre intensidad y presencia que hace que no me canse de ti, y que siempre recuerde que estás allí.

Mis manos sobre tu cuerpo, mis dedos entre blancas y negras, producen ese sonido armónico que llega hasta la profundidad de mi alma y hace palpitar a un solo ritmo mi corazón y mi respiración.

Mi amante piano, mientras mis manos acarician tu teclado, tu sonido envuelve con profundidad mi espíritu.

Tú música es una sola pieza conmigo. Es algo que solo entendemos tú… y yo.

Una mañana te cansaste de este furtivo encuentro y decidiste tomar forma humana. Llegaste a mí entre música e instrumentos, contagiándome con tu fluidez y libre albedrío. Escucharte hablar, era el calmante perfecto para mi espíritu perdido. Mirarte mientras pintabas historias y relatos daba paso a la creación de obras de arte mentales, imaginarias. Sentir tus manos en mis manos, fue dar vida a lo que siempre fuimos:

Dos almas gemelas unidas en una misma tonalidad en la clave del tiempo.


Comentarios

Entradas populares